Buscar este blog

lunes, 11 de octubre de 2010

Liu Xiaobo: Otro líder que enfrenta la adversidad desde adentro

Después de un controvertido Nobel de la Paz a Barack Obama, parece que desde la Fundación Nobel quisieron reivindicarse. Es por eso que eligieron a Liu Xiaobo,  un intelectual y activista en pro de los Derechos Humanosy las reformas en la República Popular China.Arrestado el 23 de junio de 2009 bajo sospecha de "incitar la subversión contra el poder del Estado", fue procesado con los mismos cargos el 23 de diciembre de 2009, y condenado a 11 años de cárcel el 25 de diciembre.


El premio sirvió para que la lucha pacífica que viene llevando a cabo Xiaobo sea reconocida en todo el mundo. Y el objetivo se cumplió. A las horas de realizado el nombramiento el presidente español, José Luis Rodriguez Zapatero, salió a pedir por la liberación del reciente ganador. Otro caso fue el de su predecesor en el premio, Barack Obama, quien realizó el mismo pedido al gobierno chino. Los ejemplos serían muchisimos: Venezuela, Costa Rica, Italia, Finlandia, Noruega, etc. Pero enumerar los países que opinan igual no es el objetivo de este post.

El caso de Liu Xiaobo no es tan especial como uno podría imaginarse. Ya son varios los ejemplos de ganadores del premio que buscaban defender los Derechos Humanos desde adentro de la nación. Inclusive, la gran mayoría estuvo preso antes, durante o después de ganar el premio.


Nelson Mandela, ex presidente sudafricano, recibió el Nobel de la Paz en 1993 por su trabajo para el fin pacífico del régimen de apartheid, y por sentar las bases para una nueva Sudáfrica democrática.

Nelson Mandela fue encarcelado en prisión durante veintisiete años. Mientras estuvo en la cárcel, su reputación creció y llegó a ser conocido como el líder negro más importante en Sudáfrica. En prisión, él y otros realizaban trabajos forzados en una cantera de cal.

Mandela, en un comunicado, se preguntaba: "¿Qué libertad se me ofrece, mientras sigue prohibida la organización de la gente? Sólo los hombres libres pueden negociar. Un preso no puede entrar en los contratos."


Un segundo ejemplo es el de la birmana Aung San Suu Kyi, otra activista por los Derechos Humanos, quien fue reconocida por su lucha no violenta por la democracia y los derechos humanos. En 1988, Aung San Suu Kyi  participó en el "segundo combate en pro de la independencia nacional". Este combate se inspiró en el ejemplo pacífico de Gandhi  que le llevó a propugnar una "revolución del espíritu que se manifiesta mediante el reconocimiento de la necesidad del diálogo y la compasión por los más humildes". 

En 1989 fue sometida a arresto domiciliario en Rangún. Asumió la dirección de la Liga Nacional para la Democracia, que ganó las elecciones en 1990 por mayoría aplastante. Como las autoridades militares se negaron a tener en cuenta este resultado, su partido no pudo formar un gobierno civil. A partir de ese momento solo durante unos meses estuvo en libertad. Desde 1996 sufre arresto domiciliario, sin la posibilidad de recibir visitas. 


Por último vamos a tomar un caso mucho mas cercano para América Latina: Adolfo Perez Esquivel, quien fue un Líder de los derechos humanos y fundó organizaciones de derechos humanos no violentas para luchar contra la junta militar que gobernaba Argentina en la segunda mitad de los ´70.

En 1980 recibió el Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos en defensa de los Derechos Humanos por una labor que había comenzado 5 años atras. Cuando ocurrió el golpe de estado de Jorge Rafael Videla en 1976 y con el recrudecimiento de la represión.  

Perez Esquivel contribuyó a la formación y financiamiento de los enlaces entre organizaciones populares para defender los Derechos Humanos y apoyar a los familiares de las víctimas de la Dictadura. El "Servicio de Paz y Justicia", que él fundó, evolucionó en este contexto y sirvió como instrumento para la defensa de los derechos humanos promocionando una campaña internacional para denunciar las atrocidades cometidas por el régimen militar.

En 1975, Pérez Esquivel fue detenido por la policía militar brasileña; fue encarcelado en 1976 en Ecuador junto con obispos latinoamericanos y estadounidenses; y en 1977, en Buenos Aires, fue arrestado por la Policía Federal Argentina, torturado y retenido sin juicio durante 14 meses. Mientras duró su encarcelamiento recibió, entre otras distinciones, la Memoria de Paz del Papa Juan XXIII.


Esperemos que el caso de Liu se solucione rápidamente, aunque el reciente encarcelamiento de la esposa de Xiaobo, Liu Xia, quien está detenida en su casa de Pekín tras visitar a su esposo en la cárcel para comunicarle que había recibido el galardón, no da muchas esperanzas. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Share
ShareSidebar